El informe laboral de abril de EE.UU. fue mejor de lo esperado, el resto de datos no cumplieron las expectativas
La decisión de los tipos de interés de EE.UU.: La decisión del Fed de no cambiar el volumen del programa de flexibilización cuantitativa (QE3), que significa seguir comprando bonos a un ritmo mensual de 85 mil millones dólares era de esperar por los analistas. Haciendo alusión a esa decisión fueron la reciente moderación de la tasa de crecimiento de EE.UU. y la fuerte disminución de las presiones inflacionarias. El Fed menciona la posibilidad de que el Comité Monetario cambie el volumen de las compras de bonos de vez en cuando (en ambos sentidos), según su estimación de la evolución del mercado laboral y la inflación de EE.UU.
Es interesante ver que el Fed no había cambiado su declaración respecto a la evolución de la inflación. La declaración decía: "La inflación dentro de entre uno y dos años se prevé que sea no más de medio punto porcentual por encima del objetivo a largo plazo del Comité del 2 %... el Comité también anticipa que la inflación a medio plazo es probable que se mantenga en o por debajo de su objetivo del 2 %." El anuncio del Fed se produjo a pesar de la fuerte disminución ocurrida recientemente en el precio de las materias primas y las presiones inflacionarias en la economía de EE.UU. El índice preferido por la Reserva Federal para el examen de la inflación, el índice de Gastos Personales de Consumo (PCE), aumentó durante el año pasado solo en un 1 %, frente al 1,3 % anual de marzo, muy por debajo del objetivo del Fed del 2 %. La reacción de los mercados ante el anuncio del Fed fue apenas visible. A excepción del cambio que hemos observado en la posible alteración del volumen de compras de bonos, el anuncio del Fed fue muy similar al de marzo.
Informes: cabe señalar que el informe de Nóminas No Agrícolas de abril fue sorprendentemente bueno, ya que indica una contratación neta de 165 000 empleos en abril frente a los 140 000 esperados. Los datos de los dos meses anteriores se han actualizado al alza hasta 140 000 puestos de trabajo. El sondeo de hogares, publicado en paralelo a las Nóminas No Agrícolas, indica una disminución en la tasa de desempleo a un nivel del 7,5 %, frente al 7,6 % de marzo. Asimismo cabe observar que el informe de empleo reanimó la esperanza entre los inversores de que la economía de EE.UU. no esté de camino hacia una contracción severa. Sin embargo, también se tiene que tener en cuenta que en los últimos meses la tasa de contratación de empleados se situó en un promedio de solo 152 000; inferior al promedio mensual de 182 000 de 2012.
Aparte de los datos del mercado de trabajo, observamos que la mayor parte de los datos económicos publicados durante la semana pasada siguen indicando una moderación del ritmo de crecimiento en la economía de EE.UU. y que las encuestas de expectativas indican una expectativa para la continuación de esta tendencia durante los próximos meses.
Un posible cambio de actitud en la política fiscal europea
El continuo deterioro de los datos económicos en Europa, junto con el aumento de la tasa de desempleo, llevó recientemente a cambios en la política fiscal en algunos países europeos. También hubo un cambio en la estimación de algunos de los miembros de la Comisión Europea sobre la eficiencia de la continuación de la aplicación de las medidas de austeridad. Hasta ahora, la mayoría de los estados europeos había utilizado medidas severas de austeridad debido a los requerimientos de los representantes de la Troika para una implementación de esta política antes de la aprobación de un plan de rescate. Sin embargo, los datos económicos indican que la política de austeridad no tiene éxito de momento. La economía europea sigue hundiéndose, a pesar de la fuerte disminución de la rentabilidad que ha tenido lugar recientemente en los estados PIIGS. En vista de esta imagen sombría, hay crecientes llamadas para fomentar una política fiscal menos restrictiva en el continente. En varios estados de Europa, la política de austeridad ya dio lugar a la sustitución del gobierno (a través de elecciones) y a un cambio en la política fiscal. Entre estos estados naturalmente observamos a Italia, y como su nuevo gobierno dirigido por Enrico Letta canceló parte de la subida de impuestos prevista por el Gobierno anterior. La semana pasada, durante su visita a Alemania, Letta dijo que además de cumplir con los objetivos fiscales los gobiernos deben aumentar el crecimiento económico. El presidente francés, Francois Hollande, señaló la semana pasada que planea reducir sustancialmente el impuesto sobre las ganancias de capital para fomentar las inversiones en el país. Por otra parte, Islandia recientemente fue testigo de la aparición de un grupo de apoyo de la política fiscal expansiva con el objetivo de estimular la economía.
Eventos de la semana siguiente:
- Durante la semana, se publicará la encuesta Senior Loan Officer (Altos Cargos de Préstamos) y se examinará el estado de los préstamos bancarios en EE.UU.
- Martes: El Índice de producción industrial de Francia, del que se espera un descenso del 0,1 %, los pedidos de fabricación de Alemania y los datos de Crédito al consumo de EE.UU.
- Miércoles: Índice de producción industrial de Alemania, con un descenso previsto del 0,5 % (frente a un crecimiento del 2,3 % durante el mes anterior), el Índice de Precios al Consumidor en China, con un aumento previsto del 2,3 % respecto al año anterior y el IPP (Índice de Precios de Producción), con una disminución esperada de la misma magnitud.
- Viernes: Balanza comercial en Alemania, datos chinos de importación y exportación para abril, cuenta corriente ajustada de Japón.